¡¡¡Muy buenos días a todos!!!!
Como os comenté en el post anterior, vamos a arrancar con la base de cualquier tratamiento, el cuidado de la piel.
Para ello tenemos que tener muy claro qué tipo de piel tenemos, si es cierto que es una tarea complicada ya que la piel es un órgano y con las circunstancias ambientales, hormonales o simplemente el stress puede confundirnos y presentar alteraciones.
Tenemos que observar si presentamos tirantez, rojeces, brillos, poros dilatados, descamación, granitos….
Estas alteraciones son indicadores que nos dan mucha información a la hora de detectar nuestro tipo de piel.
Por ejemplo (a groso modo): si muestras sequedad en las mejillas con brillos en la zona T podemos decir que tienes una piel mixta.
Si presentas poros dilatados, secreción sebácea en prácticamente todo el rostro e inclusive algún granito podríamos decir que tienes una piel tendencia a grasa.
Si de lo contrario presentamos tirantez, alguna que otra rojez o descamación tendríamos una piel tendencia a seca.
Una vez que más o menos tenemos detectado que tipo de piel tenemos podemos empezar con el cuidado de la piel, para ello existen productos específicos, simplemente es saber que buscar.
En el próximo post explicaremos que productos serian los ideales para cada tipo de piel.
Nos vemos pronto!!! 🙂
Como me gustan tus postsssss quiero post de piel acneicaaaa xfaaaaaa por cierto quiero truquitos eeeee un besazo mi bloglera favorita
Estoy deseando que llegue el post de la piel seca y con rojeces!!!
No te preocupes que va a ser el siguiente qun publique!!!!!